Puro Teatro


Una vez más se dijo a sí misma que con el comienzo del nuevo curso empezaría una nueva vida. Se había acabado eso de no hacer nada. Esta vez no sólo se iba a inscribir a un curso. Esta vez asistiría y se emplearía a fondo en la tarea.  Hojeó con interés los folletos de los diferentes Centros Cívicos y se sintió particularmente interesada en dos actividades bien distintas: la cocina y el teatro. ¡Ah sí! ¡Éste sería su año! Por fin empezaría a hacer teatro o a cocinar como una chef de primera categoría. Sin saber muy bien por qué, después de una breve reflexión, se decantó por el curso de teatro. Mientras procedía a la inscripción online, ya se veía en el escenario de un gran teatro representando ni más ni menos que a Electra.

Explicó a todas sus amigas lo interesante que iba a ser ese curso de interpretación teatral que iba a iniciarse en pocos días. 

Pero una cosa son los sueños y los buenos propósitos, y otra muy distinta las realidades, y Joana no iba a escapar tan fácilmente a su sino. Ése que, por los motivos más variopintos, hacía que nunca asistiera a las actividades a las que se apuntaba y que la privaba de ver hechos realidad sus supuestos deseos de ampliar sus horizontes sumergiéndose en mundos inexplorados para ella.

Un año había sido la enfermedad de su madre, que en realidad había sido una gripe pasajera. El año siguiente el pequeño incidente que le provocó una fisura en el dedo meñique de la mano izquierda. Otro, ese proyecto de fusión que, según contaba a todo el que quisiera escucharla, la tuvo ligada a su puesto de trabajo frente al ordenador durante jornadas que parecían no acabar nunca; lo que no decía es que ella era la única persona de su departamento a la que no le había afectado la tan cacareada fusión… Sí, exacto, lo habéis adivinado.  Todo eran simples excusas para justificarse, sobre todo, ante sí misma. La vida no había sido generosa en dotar a Joana de constancia; en cambio se excedió cuando llegó el reparto de la pereza.


Como todo en la vida, llegó el día en que se iniciaban las clases. No pensaba faltar, ¡claro que no! Pero…, estaba a punto de salir de casa cuando de repente sonó el teléfono con estridencia. No debería responder -se dijo-, pero lo hizo y, de nuevo, encontró un motivo para no ir.  Claro, ¿cómo le iba a decir a su amiga Verónica que tenía que salir y perderse los cotilleos que iba a contarle? Eso no se le puede hacer a una amiga…  Bueno, esto no volvería a pasar, no lo iba a permitir. Consiguió la dirección de correo electrónico del profesor y le envió un mensaje lleno de disculpas bien escritas, pero no demasiado convincentes.

A la semana siguiente Joana estaba demasiado cansada para ir y, además le acababa de venir la regla. Otro día se tropezó con su ex por la calle y, naturalmente, no podía desperdiciar la ocasión para averiguar si todavía salía con aquella boba y estúpida rubia que había  sido el motivo de su ruptura. 

Así  es como fueron pasando las semanas y los meses y coincidencias de la vida, ¡qué mala suerte!, todos los jueves -ése era el día- sucedía algo que de un modo un otro impedía que Joana acudiera a su cita con el teatro. Pero no todo estaba perdido, hacer teatro no era difícil para ella. Como dice la canción toda su vida era “puro teatro”.
Safe Creative #1912012593328

Comentarios

  1. Muy buen relato. Ser constante es una cualidad fundamental para lograr estabilidad y equilibrio en la vida. Hay que huir de las escudos justificaticos que nos aísla de la vida en sociedad.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias, Amalia. Estoy totalmente de acuerdo contigo. La constancia y la voluntad sin básicos para crecer como personas.

      Eliminar
  2. Cada día encuentras a alguien como tu Joan. Ahora viene lo peor, jajaja me parece que me veo en ese espejo, tengo que ir al gym, pero primero mis constantes viajes, después la pandemia y ahora, ahora, ahora... jajaja Muy bueno Mariángeles.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias, María! Lo que yo te diga, excusas sobran, si no que se lo digan a Joana, ja ja ja ja!

      Eliminar

Publicar un comentario

Entradas populares

La espera

Imaginación

Amor al arte

Sanación

Crónica de un viaje atípico

La amenaza